Inversiones mineras por US$ 5.829 millones en riesgo por burocracia y conflictos sociales
En el horizonte de la minería peruana para el periodo 2023-2026 se encuentran diez proyectos nuevos y de expansión como San Gabriel, Magistral, Romina, Reposición Antamina y Corani. Sin embargo, la burocracia y los conflictos sociales amenazan inversiones por valor de US$ 5.829 millones, según advierte el Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial (Iedep) de la Cámara de Comercio de Lima (CCL).
La entidad empresarial señala que los largos plazos para la tramitación y entrega de permisos están frenando el desarrollo de la industria minera. "Países como Canadá, Australia y Chile superan con creces a Perú en la concesión de estos permisos", señaló Óscar Chávez, jefe del IEDEP de la CCL.
Chávez destaca la preocupante lentitud de estos procesos burocráticos, no solo para nuevos proyectos que pueden tardar hasta tres años en recibir aprobación, sino también para aquellos que buscan expandir su vida útil. Caso emblemático es la mina Inmaculada en Ayacucho, que busca expandir su vida útil hasta 2041 con una inversión de US$ 4.436 millones.
Las minas Santa María, Shouxin, Toromocho, así como el proyecto aurífero San Gabriel, son solo algunos de los proyectos en construcción que esperan ampliación. Por otro lado, proyectos como Magistral, Romina, Reposición Antamina y Corani esperan comenzar su construcción en el 2023 y 2024.
Pese a todo, Óscar Chávez alerta que la proyección de inversión ha disminuido a US$ 1.500 millones anuales para el periodo 2023-2026, en comparación con los US$ 2.000 millones esperados hace unos años. La razón: más proyectos han sido cancelados o aplazados que los que se han iniciado o programado.
Las demoras en permisos, los conflictos sociales y las protestas anti-mineras han afectado la competitividad de Perú en términos de inversiones mineras. Mientras Chile y la República Democrática del Congo consolidan su producción futura con grandes reservas y proyectos de expansión, Perú corre el riesgo de perder su posición como el segundo productor mundial de cobre.
"Si Perú no acelera medidas concretas para fomentar las inversiones mineras, es muy probable que sigamos perdiendo terreno en el mercado mundial. Todavía estamos a tiempo de actuar", concluye Óscar Chávez.